sábado, 16 de junio de 2012

Grecia (Europa) en llamas


Estimados amigos:

                Vivimos momentos históricos. Mañana nos jugamos una parte importante de nuestro futuro en Grecia, cuna de la democracia. Y aunque anestesiados con la Eurocopa, unos señores a los que no hemos elegido, diseñan nuestro futuro sin importarles lo más mínimo nuestro sufrimiento y el de nuestros hijos.
                Si Rajoy fuera el líder que necesita España en estos momentos, ayer le hubiera dicho a Lagarde que cuando quisiéramos su opinión, se la pediríamos; que España es un país soberano y que no admitimos injerencias de nadie. Si tiemblan ante una economía que no representa ni el 2% del PIB de la Unión Europea, ¿de verdad quieren jugar con España? ¿Dónde está nuestra dignidad como españoles?
                Siempre he pensado que es una inmoralidad pagar nuestras comodidades a costa de nuestros hijos; en esencia eso es la deuda pública: gasto hoy y pago mañana. Eso no puede ser, salvo en circunstancias excepcionales. Así que la Regla de Oro de la Hacienda Pública (el equilibro presupuestario) se impone como una exigencia moral. Es por ello necesario que ya, hoy, pongamos coto a nuestros propios desmanes y el más grande de todos es un Estado autonómico que no nos podemos permitir, porque la conclusión es que vivirían una pléyade de políticos a tus espaldas, mientras tú y tus seres queridos, yo y los míos, quedaríamos reducidos a la pobreza, y el Estado de bienestar destruido.
                Para nosotros esa es la partida. Si jugamos a otra cosa (las cosas del PP-PSOE) siempre perderemos  y llamaremos a lo que no es, como lo que es, y no saldremos con bien de esta gran mentira.
                También debemos recuperar el Estado de Derecho y no esta podredumbre corroída hasta el tuétano a lo que llamamos  Justicia. Os pongo un ejemplo dinerario. Cuando el Banco de España era el Banco emisor y la emisión de moneda una alta prerrogativa de las Cortes hubo un señor que fue condenado cuando robó dinero de la Fabrica de la Moneda por alterar moneda legítima. Como la casualidad quiso que parte de ese papel moneda cayera en mis manos, se lo mandé a la Comisión Permanente de Peticiones del Senado preguntando por qué habían condenado a VLF por alterar moneda legítima si según el art. 284 del Código Penal de 1973 era evidente que aquello era absurdo. ¿Creéis que me investigaron? ¿Qué me preguntaron si sólo tenía el papel moneda que les había enviado o tenía millones de pesetas más en mi poder? Nada… (igualdad ante la ley). Debe ser que las Cortes también me invistieron de la prerrogativa de poder emitir ese dinero, porque nunca nadie me dijo nada. VLF terminaría siendo indultado. ¿Creéis en el Estado de Derecho? Ante la duda preguntádselo a Dívar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario